YERAY CORTÉS / ESPÍRITU DEPORTIVO. Zapater, Lasure, Delmás, Pombo y Guti coincidieron durante algunos minutos sobre el terreno de juego.
Corría el minuto 55 de partido cuando Natxo González realizaba su segundo cambio, retirando del campo a Alberto Benito para dar entrada a Julián Delmás.
Esa sustitución provocó que, durante 14 minutos, estuvieran sobre el terreno de juego de La Romareda cinco de los seis jugadores zaragozanos que militan en la plantilla: Alberto Zapater, Daniel Lasure, Julián Delmás, Jorge Pombo y Guti. Algo impensable hace algunas temporadas.
La nota más positiva es que la mayoría de ellos está demostrando tener un sitio en el equipo. Zapater es el pulmón del Real Zaragoza y su presencia en el centro del campo es vital. Delmás ha aprovechado al máximo la oportunidad que ha tenido tras la lesión de Benito, que tendrá que esforzarse duro para recuperar el lateral.
Guti, por su parte, deslumbra con el paso de los partidos y, pese a tener mucho margen de mejora dada su juventud, La Romareda está empezando a ver a un jugador con un futuro muy prometedor. Ante el Valencia, tomó las riendas del equipo por momentos y lo controló a su antojo. Mientras que Dani Lasure tuvo la oportunidad de jugar en competición oficial esta temporada y no dejó un mal sabor de boca en el carril zurdo.
Por otro lado aparece Jorge Pombo. El '8' blanquillo no acaba de encontrar ese rendimiento que le llevó a ser pieza clave en el último tramo de la pasada campaña. Se le ve nervioso, precipitado e individualista.