GUILLERMO COSCOLLA / ESPÍRITU DEPORTIVO. Se perdió el último partido por acumulación de tarjetas.
Para el próximo partido en Santo Domingo ante el Alcorcón, el técnico aragonés recupera a Marcelo Silva y si la semana avanza con normalidad para José Enrique también podría contar con él para el lateral zurdo.
El regreso de Marcelo Silva, tras cumplir su segundo ciclo de sanción en lo que va de temporada, obliga a Raúl Agné a recomponer la defensa respecto al último partido ante el Levante. El uruguayo fue indiscutible para Milla y también lo está siendo para el de Mequinenza. Y no es para menos porque junto con Jesús Valentín, jugador que se incorporó al equipo en el mercado de invierno, están siendo los dos futbolistas que mejores sensaciones están dejando a nivel defensivo.
Las alternativas para formar la línea de cuatro el próximo domingo son varias. Fran, recuperado y tras un buen regreso al equipo después su lesión, vuelve a ser el dueño del carril derecho, Cabrera, futbolista que sólo se ha perdido un partido en lo que va de temporada parece inamovible, Marcelo Silva, ya de vuelta, formaría la pareja habitual con Cabrera, y José Enrique, si progresa adecuadamente durante la semana, volvería a su lateral zurdo. En esta defensa, Valentín y Feltscher serían los sacrificados y empezarían desde el banquillo. Si finalmente José Enrique no llega a tiempo, todo apunta a que sería el jugador suizo-venezolano quien volviese a ocupar el lateral zurdo como en el último partido ante el Levante. Otra opción sería que Cabrera se marchase al banquillo, lo que le haría ser suplente por primera vez en lo que va de Liga, y Valentín se mantendría en el once titular junto a Marcelo Silva en el centro de la defensa. Y la otra opción que podría manejar el técnico es la de repetir la misma defensa que el pasado sábado: Fran, Valentín, Cabrera, Fletscher. Marcelo Silva y José Enrique, si entra en la convocatoria, serían suplentes.
En definitiva, múltiples opciones las que puede manejar en defensa Raúl Agné para visitar al Alcorcón con el objetivo número uno de poner el candado a la portería zaragocista, algo que no se consigue desde el pasado mes de noviembre ante el Mirandés cuando el equipo blanquillo venció por dos goles a cero al conjunto burgalés.