ESPÍRITU DEPORTIVO. El Basket Zaragoza y Salvador Guardia han llegado a un acuerdo para su integración en el organigrama del club como director técnico, convirtiéndose en el máximo responsable del área deportiva.
Además, prestará su apoyo en otras parcelas gerenciales aprovechando su experiencia desarrollada en su anterior etapa en Bilbao Basket.
Guardia (Valencia, 1974) llega al Tecnyconta Zaragoza tras dos años ejerciendo la representación de jugadores y captación de nuevos talentos, primero en SG Group 11 y desde octubre del pasado año en Romaior Sports, tras su estancia en la Fundación Bilbao Basket.
El nuevo director técnico del conjunto rojillo cuenta además con una amplia carrera profesional como jugador, tras dos décadas dedicado a la práctica del baloncesto. Salva Guardia pasó por diferentes clubes de la Liga ACB, comenzando por el CB Salamanca, Peñas Huesca, Caja San Fernando, Bilbao Basket y, sobre todo, Baloncesto Fuenlabrada, donde desempeñó la gran parte de su trayectoria.
Salva Guardia: “Vuelvo a Zaragoza, donde comenzó todo”
En declaraciones en exclusiva a la web del club, Guardia refleja la ilusión en este nuevo capítulo profesional: “Comienzo una nueva etapa en mi carrera profesional que se inició como jugador, que pasó luego por la gestión deportiva y de club con dos años conociendo el mercado como agente, para cerrar ahora ese círculo volviendo a Zaragoza, donde comenzó todo”, recuerda con una sonrisa.
Antes de emprender su nueva tarea, el exjugador también ha querido responder a la confianza del club: “Agradezco al Basket Zaragoza la confianza puesta en mí para vincularme de nuevo a una ciudad con la que me identifico”, concluye el nuevo director técnico de la entidad rojilla.
Vinculado a la ciudad y a Casadevall
Antes de su llegada a la elite, Salva Guardia se formó a principios de los años 90 en las categorías inferiores del Ferrys Llíria, cuyo equipo en Primera División comandó Andreu Casadevall durante tres campañas. En el curso 91-92 el pívot llegó a Zaragoza para formar parte del Júnior del C.B.Z. y, un año más tarde, competir en las filas del Conservas Daroca, llegando a disputar un encuentro de ACB con el Banco Natwest Zaragoza. En 1995, durante su primer curso completo en la elite del baloncesto español, volvería a reencontrarse con Casadevall, esta vez en el Grupo AGB Huesca. Relación que se extendería durante unos meses de 1997 en Fuenlabrada.
Fuente y foto: Prensa Basket Zaragoza
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